13.5.08

guonder guman




Con precisión cortó la lata de dulce de batatas. De los laterales sacó dos relucientes brazaletes dorados. Dobló cuidadosamente los bordes para que no lastimaran sus muñecas. La tapa inferior estaba destinada a ser bincha. En pocas horas, había nacido una mujer maravilla.
─¿Y ahora qué hacemos?─le pregunté a mi hermana que permanecía mirando el horizonte siempre con el mentón hacia arriba, orgullosamente maravilla.
─Vamos a rescatar a todas las mujeres del mundo ─respondió estirando su capa-sábana y agitando dos ramas que habían dejado de ser de sauce para convertirse en lazo dorado.
Corrimos, caminamos, volvimos a correr. Observamos los rostros de muchas mujeres; escuchamos sus llamados silenciosos. Necesitaban ser rescatadas de miserables días, de angustias infinitas, de opresión desmedida. Pero no supimos cómo. El traje no funcionaba.
─A lo mejor ellas necesitan uno propio ─llegamos a esa conclusión y regresamos a casa.
La serie guonder guman está impregnada de esos andares. A cada mujer le fluye subterráneamente una mujer maravilla, deseando que de ese soporte fantástico puedan emerger formas novedosamente felices de feminidad.

2 comentarios:

floraphex dijo...

felicitaciones mara! celebro tu blog! me encantan tus cuadros y textos geniaaa besos para toda la flia, guander gumannn!!!

Patricia dijo...

MARA!!!! que bello, me encanta!!! te deseo todo lo mejor, que sigas con tu arte a pesar de las vueltas y volteretas de la vida...
un abrazote gigante
Pato